Ciudadanos apodan a perrito el “Hachiko de Culiacán”, tras permanecer tres días afuera de un minicasino clandestino en el centro de la ciudad, esperando a su dueño, quien falleció durante un ataque armado en el lugar.
El canino estuvo acostado frente al local, ubicado en la calle Morelos, entre Colón y Escobedo, sin comer y resistiendo el clima. Su dueño fue una de las dos víctimas mortales del ataque, en el que también resultaron heridos una mujer y un payaso.
Ante el abandono del can, un grupo de activistas protectores de animales, que prefirieron mantener su identidad en reserva, decidieron intervenir. Según relató Oscar Sánchez Beltrán, secretario de la Unión de Locatarios del Centro de Culiacán, los rescatistas trasladaron al perro en una canastilla de metal para brindarle atención médica.
“Se lo llevaron a curarlo y protegerlo”, explicó Sánchez Beltrán. El animal, que aparentemente padece una enfermedad grave, fue equipado con un bozal para facilitar su manejo, ya que presenta síntomas de posibles afecciones severas.
El establecimiento, conocido localmente como “jugada”, fue clausurado por la Fiscalía General del Estado tras el violento incidente, lo que dejó al perro sin ningún tipo de cuidado.
Nadie atendió a este pequeño perrito, color negro, el cual se quedó echado desde el pasado fin de semana, en espera de que saliera su dueño”, lamentó Sánchez Beltrán.
El colectivo protector que lo rescató sigue velando por su bienestar, aunque prefieren mantenerse en el anonimato por precaución.
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